¿Dónde prefieres trabajar y cómo?, haber realizado esta pregunta hace unos años, nos habría parecido mentira.
Tener la facultad de elegir desde dónde quiero trabajar o contar con cierta flexibilidad son aspectos muy valorados por el candidato al puesto. Se reducirá el ausentismo ocasionado por un simple dolor de cabeza o porque alguno de sus hijos se queda en casa cuando no tiene clase, con la ventaja añadida de no tener necesidad de buscar a alguien que se encargar de él. Hoy en día es una realidad. Cada vez más corporaciones dan la libertad de elegir qué fórmula nos gustaría más a la hora de desarrollar nuestra jornada laboral. Y aunque el modelo híbrido se ha impuesto, entre algunos profesionales esto no es suficiente. Así ha opinado el director de Machine Learning de Apple, Ian Goodfellow al anunciar su dimisión por considerar que la vuelta a la oficina penaliza la creatividad de su equipo.
Es verdad que hay opiniones para todos los gustos: desde quien está encantado de no perder tiempo y dinero en desplazamientos a aquel que “se sube por las paredes” al cabo de pocos meses porque necesita salir de su hábitat natural.
Sin embargo, la tendencia es clara en cuanto a que cada vez más gente prefiere trabajar en remoto.
La propuesta en remoto también tiene importantes ventajas para las corporaciones, que ahorran en costes de desplazamientos y dietas, además de reducir los metros cuadrados en sus instalaciones, con el consiguiente ahorro de energía. Sin embargo, y aunque el porcentaje de empresas que permiten el 100% de trabajo en remoto sigue siendo ínfimo, la tendencia es evidente en las empresas americanas.
Antes de la pandemia, solo el 5% permitía que el 40% de sus empleados tuviera más de tres días de teletrabajo; durante el Covid, esto mismo se dio en el 72% de las corporaciones.
Una ventaja vital del teletrabajo es la fidelización del empleado. Al disponer de autonomía, flexibilidad y ahorrarse en costes, se crea un vínculo de confianza mutua y se adquiere más compromiso, evitándose la empresa la rotación continua de personal y consiguiendo la satisfacción personal del trabajador.
Todo esto nos lleva a considerar que el empleado podrá trabajar “desde cualquier lugar” y necesitará las herramientas necesarias para ello: portátil, monitor, móvil e impresora con scanner, como elementos imprescindibles. En el caso de esta última, necesitará disponer siempre del consumible adecuado a tiempo para no ver interrumpido su trabajo, además de un sistema de control y de recogida que garantice la economía circular y la reutilización del cartucho o tóner.
La App de Nubeprint permite la reposición automática del consumible mediante la monitorización de impresoras en remoto, garantizando la sostenibilidad porque optimizará el cambio de consumible a su momento justo, evitando el desperdicio innecesario.
Fuentes: cincodias.elpais – La Vanguardia – Nubeprint